El olor de un motor en llamas, el fuego que alumbra por la ventana, los pasajeros orando por la salvación, es una escena escalofriante, que haría entrar a cualquier pasajero en pánico, y seguramente su última pregunta será: «¿Voy a morir?»
Esa fue la realidad aterradora capturado por la cámara de un reportero gráfico, Beiwhart, después que uno de los motores de un Airbus A330, se incendió durante un vuelo, junto con su esposa e hijos desde Singapur a Yakarta.
El vuelo aterrizó sin problemas, y los pasajeros desembarcaron, uno de ellos, con una documentación aterrador de lo que podría ser una experiencia cercana a la muerte
En la historia del veterano fotógrafo de la agencia Reuters, describe cómo en el vuelo de Cathay Pacific CX 715, el 16 de mayo, se oyeron dos explosiones y se despertó apretando la mano de su esposa.
Describe un olor fuerte que abundaba su nariz, lo que confirmaba la experiencia más aterradora que viviría más adelante.
«El avión empezó a vibrar, cada vez más difícil, sostuve la mano de mi esposa con fuerza y miraba su cara mientras ella comenzó a orar. Mis dos hijos más jóvenes estaban dormidos, Mire hacia fuera por la ventana y dije. «Veo luz, veo fuego, veo fuego». Después de unos segundos la electricidad no funcionaba».
«Me di cuenta que el avión, un Airbus A330, tenía un gran problema. Tenía miedo porque pensaba que iba a morir. Su esposa miró a los ojos y preguntó: «moriremos? Will» Yo tenía miedo y no podía responder a la pregunta».
«Vamos a morir juntos, para que podamos volar al cielo juntos, pensé». Un auxiliar de vuelo sentada en frente de Beiwhart, explicó que el motor de estribor estaba en llamas, y el avión estaba volando de vuelta a Singapur.
Armado con una cámara Canon, EOS5dmk2 alrededor de su cuello, captó una serie de fotos que documentan la escena: el asalto de los pasajeros por los pasillos con chalecos salvavidas, los rostros congelados de las personas en estado de shock, y todos pensando que en la idea de que podría ser su último momento.
Beiwharta fotografiado a su propio hijo, que cubre su rostro, mientras otro hombre detrás de él, está mirando fijamente.
El avión hizo un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Changi en Singapur. El piloto, Bradley Chiccame, se comunicó con los pasajeros por el intercomunicador: «Soy el capitán Brad, la situación está bajo control, el fuego del motor ha sido extinguido. Por favor, espere en línea y caminen a la salida por la puerta principal. El personal de tierra se hará cargo de ustedes. Gracias».
Luego desembarcaron, capturando las imágenes de los pasajeros aliviados, recuperados de la histeria, los ojos vidriosos, enrojecidos y llenos de lágrimas.
Fuente: dailymail
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