Gemma Sissone ha compartido una desgarradora publicación en Facebook desde el más allá, después que murió de cáncer a los 39 años.
La fisicoculturista escribió inquietantemente que espera que su muerte aliente a otras personas que padecen cáncer a que se examinen, incluso si creen que lo han vencido.
Los médicos le dijeron anteriormente que había vencido el cáncer y solo debía hacerse exploraciones anuales de control. Pero justo un mes después de su última resonancia magnética en agosto esta se iluminó como un árbol de Navidad, mostrando tumores secundarios en su cuello, espalda, hígado y estómago.
El cáncer en su columna vertebral se había comido las dos vértebras y media cuando Gemma recibió el golpe desgarrador de que eran cáncer secundario e incurable.
La fanática del gimnasio se casó con su pareja Ricky Moore cuatro días después de que ingresara en un hospicio donde pasó sus últimas semanas.
Sus amigos y familiares quedaron atónitos cuando una publicación en su Facebook apareció horas después de su muerte.
Decía: «Si esto se publica, significa que finalmente he muerto después de semanas de aferrarme demasiado tiempo».
«Aunque tendré el corazón roto por dejar atrás a todos mis seres queridos, me alegrará mucho alejarme de lo que esta enfermedad me ha dejado».
«Realmente espero que al compartir mi historia de cáncer y solicitar que los análisis de cáncer secundarios sean obligatorios, haya tenido un impacto positivo, e incluso si solo una persona recibe ayuda de esto, sentiré que he logrado algo bueno».
Fuente: thesun
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